eso...

DIA UNO.

Hace un tiempo que vengo escuchando nine inch nails, la banda de trent reznor, y hace unos meses atrás me enteré que venían a Chile, compré mi entrada el primer día de la preventa chilena, y mantuve guardado el ticket hasta hoy. Lo revisaba de vez en cuando, para saber si aun estaba ahí, lo moví un par de veces de lugar. Y hoy lo metí dentro de una revista, “la espada de azrael”, y me fui para Ovalle.

Esperamos con mis papás en la casa de mi abuela, para que me llevaran al terminal cerca de las 3am. Nos robaron la radio del vehículo (estamos en Chile), y después de echar un par de maldiciones al respecto, me llevaron al terminal. Me subo al bus, una de esas maquinas que vienen excelentemente acondicionadas desde el norte, donde el aire tiene una sensación sedosa, casi viva, y empiezo a buscar mi asiento, llego y, sorpresa, está ocupado (constatando nuevamente que me encontraba en la fértil provincia señalada). Luego de conversar con el “acomodador” y viendo que la opción era quedarme en Ovalle con la plata del pasaje, opté por viajar en el asiento del auxiliar, junto al chofer. A todo esto, son las 4am, el bus venia con retraso, ¡Viva Chile!

Me tocó un chofer con ganas de conversar, y viendo que el asiento no cumplía con las condiciones mínimas para cerrar los ojos cómodamente y la vista de la noche era bastante decente desde el vidrio donde reventaba cada cierto rato un bicho, me resigne a no dormir hasta que se desocupara un asiento. Tuve mi recompensa con 3 estrellas fugaces, y el ir viendo despertar el día, recortando de a poco las siluetas de los cerros en el horizonte.

DIA ZERO.

Me fue a buscar mi hermano al terminal, y estuvimos dando vueltas por Santiago, temprano, cosa que me gusto harto, solo claro, hasta que la ciudad comenzó a despertarse y a ocupar sus espacios, a saturar de caras los lugares, a restringir la movilidad, por ejemplo, en el metro. Cuando uno a estado varias semanas con la compañía del reflejo y un par de personas de vez en cuando, esta saturación, esta densidad choca, incomoda, molesta. En la tarde nos fuimos al departamento de un amigo, a hacer hora, acordarse de weas, y principalmente arrancar de esta masa viviente que a esta altura era Santiago el sábado (estoy seguro que hay días peores, pero para mi, eso ya es desagradable).

… sigo después